Eficiencia, esa es la palabra. Es más eficiente mover 1MByte a través de la red a una velocidad casi relativista, o mover 80kg de humanidad en un confortable contenedor metálico de tonelada y media a 50Km/h?
Y qué tal si en ambos casos el objetivo final es el mismo: realizar una transferencia bancaria para cubrir el pago de la factura de internet. Irónico pero cierto.
Las ciudades buscan desepseradamente escapar del sofocamiento provocado por la creciente masa de vehículos que atraviesa sus calles cada día, pero si nos detenemos a pensar, cuátos de esos vehículos realmente necesitan recorrer la ciudad? Cuántos de los usuarios de las vías pudieron haber cumplido su objetivo con tan solo un click del mouse? Cuántas de esas toneladas de metal en movimiento pudieron ser eficientmente remplazadas por billones de bits en la red? Cuántos de esos miles de galones de combustible quemado pudieron ser reemplazados por unos cuantos centenares de vatios/hora de consumo eléctrico.
Debemos admitirlo, pero la Internet ha dejado de ser una simple biblioteca gigante en donde encontramos hasta lo inconcebible. Si le damos el enfoque adecuado es una herramienta que permite hacer en segundos lo que antes tomaba horas y hasta días. La capacidad de interacción entre equipos y usuarios conectados a la gran red crece en forma exponencial.
Y qué tal si en ambos casos el objetivo final es el mismo: realizar una transferencia bancaria para cubrir el pago de la factura de internet. Irónico pero cierto.
Las ciudades buscan desepseradamente escapar del sofocamiento provocado por la creciente masa de vehículos que atraviesa sus calles cada día, pero si nos detenemos a pensar, cuátos de esos vehículos realmente necesitan recorrer la ciudad? Cuántos de los usuarios de las vías pudieron haber cumplido su objetivo con tan solo un click del mouse? Cuántas de esas toneladas de metal en movimiento pudieron ser eficientmente remplazadas por billones de bits en la red? Cuántos de esos miles de galones de combustible quemado pudieron ser reemplazados por unos cuantos centenares de vatios/hora de consumo eléctrico.
Debemos admitirlo, pero la Internet ha dejado de ser una simple biblioteca gigante en donde encontramos hasta lo inconcebible. Si le damos el enfoque adecuado es una herramienta que permite hacer en segundos lo que antes tomaba horas y hasta días. La capacidad de interacción entre equipos y usuarios conectados a la gran red crece en forma exponencial.